La patata del amor
Un glorioso dia tuve el placer de descubrir en mi bolsa de la compra, entre otros ordinarios tubérculos, este portento de la naturaleza: La patata del amor, una patata que ha luchado en contra de su propio destino ovalado para expresarse en favor de la paz y el amor mundial.
Escapó asi de su suerte, la muerte en forma de tortilla española para convertirse en un destino obligatorio para peregrinos y activistas del amor. En este mundo que algunos consideran ya perdido, milagros como este nos dan razones para seguir creyendo en la existencia de lo divino.
4 Comments:
Ja Ja Ja... es mejor que la Virgen escarificada en la tostada. Cuanto amor en un solo tubérculo :)
Es como el Corazón Verde pero en marrón-patata...habérsela zampado y, al modo de las tribus caníbales, hubiera metabolizado ese mogollón de amol...
Julito, yo creo que eso es sacrilegio, es como comerse la manzana prohibida por querer parecerse a Dios.
Jo...que reflexión mas chachi, Doña usted...la voy a fagocitar y a hacerla mía...con su permiso,claro...
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